jueves, septiembre 27, 2012

Ninguna mujer maravilla

Si tuviese el don de la telequinesis sería definitivamente obesa.

Si tuviese el don de la telepatía terminaría, sin lugar a dudas, haciendo carrera en el area de los asesinatos en masa.

Es una verdadera suerte que no tenga superpoderes
porque hoy, por ejemplo, no los usaría para el bien.


viernes, septiembre 21, 2012

¡Qué manera de cambiar para ser siempre la misma!

Hace 15 años tenía un jean que me hacía sentir linda, una remerita blanca con un Guille dibujado a mano, un paquete de galletitas tentación en la mochila, un puñado de amigas, un montón se compañeros y un primer novio desde hacía unos meses. El día estaba hermoso, el club estaba lleno, la música estaba fuerte, el animador estaba demasiado exaltado, los grupos de pibes estábamos completamente entretenidos. Hace 15 años, después de un partido de fútbol mixto agarrada de la mano del amigo del novio de una amiga, descubría por primera vez el efecto que me generan las escenas de celos.

Hace 10 años tenía una vida completamente diferente. Un departamento de estudiantes, amigas de distintas ciudades, el pelo corto, el bolso lleno de regalos, un fin de semana precioso y un novio de otra provincia que había decidido nacer justo, justo, el 21 de septiembre entonces la fiesta el múltiple. Hace 10 años, después de horas de viaje y de reencontrarme con sus amigos y su familia para sentirlos como propios, entendía que hay momentos en los que es inevitable ser feliz y demostrarlo.

Hace 5 años tenía una casa que era la de siempre pero ahora era sólo mi casa. Un trabajo con una gran amiga, horas tardías para cumplir con fechas de entrega, un auténtico desparramo de amigos, una familia que se movía por pares a excepción mía, una vida sin rutina establecida que se regía por los horarios de las muchas reuniones, una alegría reciente que me sobrepasaba por un montón y una especie de novio con el que nunca encontramos el tiempo de funcionar a duo. Hace 5 años, después de un puñado de horas de fiesta al aire libre, de copos de azúcar escuchando música y de mirarlo durante todo el recital, aprendía que hay vínculos que no son para ser y que no hay tiempo ni afecto que pueda con eso.

Hoy tengo esta vida extraña. Esta casa que finalmente se siente mía, este patio con una cascada de florcitas blancas y un ramo de malvones rosados y un limonero lleno de frutos y promesas, estos trabajos que me gustan aunque me hagan renegar, estos amigos que salvan la vida, que mejoran los días, que arreglan el cuerpo y sanan el alma. Esta promesa de fin de semana largo lleno de charlas y bailes y reuniones, de visitas y juntadas, de reencuentros y brindis. Hoy, después de vaciar definitivamente de obligaciones el itinerario de los próximos días y de volver a sentirme contenta y de querer, de nuevo, ser juego y trabalenguas, aplaudo, otra vez, este milagro de rearmarnos, esta maravilla de encontrarnos, esta delicia de ser.

¡Ey! Ya es primavera.



What good is sitting
Alone in your room?
Come hear the music play
Life is a Cabaret, old chum
Come to the Cabaret.

Liza Minnelli
Life is a cabaret | Cabaret

jueves, septiembre 20, 2012

Detallistas

El piquito que traba los cierres para que no se abran.
El resorte en la bombilla para que se más fácil limpiarla.
El tope en las puertas corredizas.
El imán en los botones.
El alambrecito para enhebrar agujas.
Las tapas a rosca.
El brazo móvil de los sacacorchos que hace tope contra la botella.
Las líneas de puntos calados en los papeles para cortarlos más fácil.
El sistema para regular el largo en los breteles de los corpiños.
El click con la ruedita de scroll para abrir los vínculos en una pestaña nueva.
El botón de silenciar en teléfonos, en controles remotos (¿no vendrá para personas también?)

¡Cuánto bien me hace la gente que, a fuerza de detalles, simplifica la vida!

jueves, septiembre 13, 2012

Coherencia inconsciente

De la nada, subiendo al ascensor, descubro que los grandes enunciados de mi vida, además de ser una declaración de principios son una estricta descripción de mis comportamientos.

Y soy orgullosamente feliz.

miércoles, septiembre 12, 2012

Es lo que hay

No se me ocurre buscar a la gente en facebook,
miro en el padrón electoral.

martes, septiembre 11, 2012

El aire en que no estás

Y no me sirve de nada no pensar en un buen regalo o esquivar las verdulerías para no tentarme de preparar una torta de frutillas o tratar de respirar profundo, como si me entrara aire en los pulmones. Y no me alivia acordarme de las muchas veces que celebramos tu vida, tu día, tu cumpleaños o todo el tiempo que compartimos o todas las cosas importantes de esta vida que me enseñaste. Y no me alcanza ni apenas encontrar en cualquier otro ser humano un gesto leve, ínfimo, microscópico que se parece tan fugazmente a algún rasgo tuyo que me estremece el cuerpo hasta escurrirme lágrimas aunque pretenda hacerme la dura, la fuerte, la entera.

¿Cómo hago, hoy, para salir al mundo a ser una persona completa? ¿Qué me invento para respirar sin que arda? ¿A quién abrazo medio upa mientras me tararea una canción de infancia? ¿Cuánto espacio ocupa una ausencia?

Porque no estás y me falta toda una parte de esta vida
y hoy nada llena ese hueco.


Retuve estrellas en el sur para animar tus ojos
guardé los hielos del glaciar para azular tus ojos
que sepas que no es fácil respirar el aire en que no estás

Pedro Guerra
El aire en que no estás | Ofrenda

lunes, septiembre 10, 2012

Desorden

¿Viste cuando sentís como si la sangre te burbujeara adentro y no sabés si es de ansiedad o de bronca? ¿Viste cuando se te mezclan sin posibilidad de diferenciar las carcajadas descomunales y ese nudo asfixiante en la garganta? ¿Viste cuando tu estado de ánimo cambia a cada segundo de un extremo al otro? ¿Viste cuando las sensaciones opuestas se te superponen de tal manera que es imposible detectar cuál prevalece? ¿Viste cuando sos un desastre de emociones y no podés parar ni la cabeza ni los sentidos? ¿Viste cuando sólo podés dejar de temblar porque de repente se te relaja el cuerpo entero y vuelta a empezar? ¿Viste cuando no podés siquiera intentar describir qué es lo que te pasa por adentro? ¿Viste cuando intentás conservar una digna cara de pócker y recurrir a las respuestas estándar para que no se note que sos incapaz de poner atención en lo que está pasando alrededor? ¿Viste cuando el llanto no alivia y las risotadas no extenúan?

¿Viste cuando sentís que lo único que te puede estabilizar es un buen abrazo largo, fuerte, en silencio, hasta que cuerpo, espíritu y sensaciones finalmente se reconcilien y anhelás fervientemente que cualquier abrazo sirva?

Así estoy yo.

jueves, septiembre 06, 2012

Reconstrucción

Y vuelvo a ser un instante. Espío por la ventana programando mi día. Cuando deja de llover copiosamente, salgo a la calle, salgo a las últimas gotas chiquitas que recuerdan lo que fue, salgo a mirarle el pupo a las nubes, a llenarme los pulmones de aroma a lluvia, a esquivar charcos por las veredas, a pispearle los ojos a todas las personas con las que me cruzo, a inundarme los oídos de música preciosa, a caminar un par de cuadras tan a gusto con el mundo que debería escocerme pero sólo me genera cosquillas, a ser feliz, otra vez, por los mucho detalle que forman los días.

Y vuelvo a bailar en las esquinas mientras espero para cruzar y a canturrear en silencio canciones que me hacen bien y a pensar lo encantadoramente sexy que me resultan los hombres con jeans y a sonreirme con picardía y a deleitarme con la expresión de estupor con que me miran las señoras cuando paso y a agradecer con un gesto el par de piropos chistosos y a sorprenderme cuando justo en el momento indicado Pedro canta en mis oídos será que te embellece ser feliz y a ser, por un momento, por un segundo, por una eternidad, una de las personas que más me gusta de todas las que soy.

Y puedo ser, otra vez, un castillo
aunque más no sea por un instante.