martes, octubre 28, 2008

Propiedad conmutativa

El mundo se divide entre los que hablan y los que escuchan.

Conozco gente que tiene una facilidad asombrosa para hablar de si misma. Personas que no tienen grandes frenos, que son capaces de exteriorizar sus estados de ánimo sin paredes ni pudores. Son los que insultan a viva voz, los que lloran desconsoladamente, los que tienen un mal día manifiesto, los que cantan, bailan, silban, sonríen de modo evidente cuando están felices.

Habemos otros humanos a los que demostrar la sensación exacta en el momento preciso nos resulta mucho más complejo. Necesitamos un clima más propicio, más intimidad, más confianza. Tampoco vamos a ser extremistas y decir que jamás se nos nota una emoción momentánea pero lo cierto es que hay que prestarnos más atención para descubrirlas.

Los que somos menos espontáneamente demostrativos creemos que todo el mundo tiene indicios poco evidentes de lo que sucede. Entonces andamos por la vida escudriñando al interlocutor. Archivamos las frases, las fechas, los gustos y demás de la otra parte para armar una sólida base de datos que nos permita dilucidar, en otro momento, cómo está esa persona. Escuchamos atentamente cada palabra y le damos valor, mucho valor... demasiado.

La gente que habla vuelve las cosas más sencillas. Dice lo que necesita cuando lo espera, cuenta lo que siente cuando sucede, aclara lo que ofende cuando duele y calla lo que no interesa cuando es irrelevante. Si todos fuésemos así no harían falta las bases de datos. Cada uno diría, el día antes de navidad, yo prefiero ensalada de frutas en vez de esperar que otros lo recuerden. Anunciaríamos nuestros cumpleaños durante la semana previa y vociferaríamos qué posibles regalos nos harían sentir bien y así con casi todas las cosas importantes de la vida.

Tengo una muy buena amiga con la que nos conocemos profundamente desde la segunda charla. No sé cómo lo hacemos, ella tampoco. Lo cierto es que sin siquiera vernos, sabemos cómo estamos. Ella sabe cuándo necesito descomprimir, yo recuerdo las cosas que ella no debería olvidar. Ella me pelea por nimiedades y de manera idiota cuando tengo un día terrible (finalmente exploto y descargo todo aquello que me molestaba), yo le ayudo a mantener el equilibrio en sus relaciones con las otras personas.

Ella es de las que hablan, yo soy de las que escuchan. Cuando estamos separadas nos cuesta mucho mantener la perspectiva. Cuando nos juntamos logramos un equilibrio dinámico difícil de igualar. El mundo se divide entre los que hablan y los que escuchan. El mundo se armoniza entre los que escuchan y los que hablan.

26 comentarios:

Minerva dijo...

Mi identificarme contigo... yo observadora participante. Callo analizo y por lo general lo hablo conmigo misma. Esto muchas veces me perjudica. Guardo mucho y de repente exploto con una pavada, a raiz de la bola de nieve que venia gestandose. Por suerte tengo tambien a mi amiga habladora. Somos opuestas y sin embargo nos adoramos porque nos equilibramos mutuamente. Es muy sano, no?

Anónimo dijo...

El equilibrio justo. No me imagino un mundo lleno de Cristinas y Néstores que sólo hablan sin prestarle la más mínima atención a lo que te están diciendo.

Café (con tostadas) dijo...

Hola!

Minerva: yo creo que sí, que es muy sano...

Xavier: no me haga empezar con la política, por favor! Que con Néstor y Cristina nomás tenemos para despotricar largo rato.

Saludos!

Eric dijo...

El ying y el yang, que le dicen, no? Muy buen post!

BLUEKITTY dijo...

Llegué en una de esas casualidades y como me gusta muchísimo el café con leche (como es de suponer) me atrajo el nombre de tu blog y entré a ver con qué me encontraba. Me gustó. Te agrego =)

Con respecto a lo que decís, siempre fui una persona de esas que pueden escuchar, escuchar por horas lo que el otro necesita decir. Pero siempre me costó poder decir lo que yo necesito decir, a veces las palabras no dicen lo que uno quiere decir.

Pau Go dijo...

Yo soy bastante abierta para hablar de mis cosas, pero la gente se acostumbró a que fuera de las que escuchan. Entonces, me paso más tiempo escuchando que hablando.

Por otro lado, me pasa que la gente me cuenta cosas que no le cuenta a todo el mundo. Qué tengo? Ni idea...

Perdida en la vida dijo...

mm yo soy de las que escucha, soy extrovertida pero no para hablar de mi, soy la tipica que escucha y aconseja, y siempre tiene tiempo...

Sil dijo...

Llegué acá desde el blog de Dago y me gustó, así que pasaré seguido.

Saludos de una observadora no participante cordobesa. :)

Mr. York dijo...

lo mio es más complicado. Tengo pocos filtros por lo que digo lo que pienso, como sale, y con el tiempo desarrolle una impunidad muy divertida.
Pero solo con pocos.
No hablo al pedo.

Ezequiel dijo...

Me siento demasiado identificado entre los que callan lo que sienten, tambien estoy dentro de los que no escuchan siempre.
Pienso todo lo que digo y entre pienso lo que siento, se hace demasiado tarde para decirselo a quien corresponda. Luego simplemente me siento mal y no tengo a quien decircelo.

Vas a terminar convenciendome de ir al Psicologo.

carmela dijo...

Yo no podría definirme bien a que grupo pertenezco, pero si tengo que elegir creo que soy de las que hablan (lo pensé dos segundos: si, soy más extrovertida que introvertida).
Lo que pasa es que me gusta mucho escuchar y observar también.
Creo que alterno a veces.

¿eso es posible?

besos

· dijo...

creo que es un problema de contenido y continente. todo contenido requiere de un buen continente para verterse. y esta contitucion de la capacidad de contenido y continente para aparearse es atavica.
hay personas que de tanto hablar de si mismas despojan a continente de su capacidad alojante y otra que de tanto pedir del otro con voracidad ovina, despojan a contenido de su capacidad penetrante.

un amigo solia decir que el mundo se divide en dos: los que dividen al mundo en dos y los que no. esta es quizas la base de las claves dicotomicas de bioloia o etnologia.

Anónimo dijo...

Yo soy de las que hablan y demuestran tranquilamente, pero tambien se escuchar sin interrumpir.
El problema es que en algunas circunstancias no hay que hablar ni demostrar tan abiertamente, nos puede jugar en contra y otras no hay que callar tanto por la misma razón

Lady Chatterlry dijo...

Yo no sé en cuales estoy.A veces soy de las q hablan, otras de las que necesitan que le saquen las cosas con sacacorchos. Pero a la vez suelo estar atenta a lo que no dicen los que no hablan... mmmm, vale el medio?

Dago dC... dijo...

Yo soy de los que escucha. Y es cierto, estamos todo el tiempo recopilando información sobre los demás. "Habemos..." pensé que el único que usaba esa conjugación era mi novio (que es un obsesivo de la RAE) jajaja...

Saludos cafecito: Me gusta mucho el blog. Sigo leyendo. Besos.

Staff de Bla Bla Bla dijo...

A lo hecho pecho!

Café (con tostadas) dijo...

Hola!

Eric: bienvenido! si, creo que viene por ese lado...

Bluekitty: gracias! cuanto más hablo más me alejo de lo que pienso creo que era así!

Pau: también me pasa eso! me cuentan la vida esperando un colectivo, ponele...

Perdida en la vida: si, hablamos hasta por los codos pero no de nosotras!

Sil: gracias! y bienvenida. (Extraño tu provincia!)

Mr. York: ya había notado lo de tu impunidad! jajajaja

Ezequiel: ir a un psicólogo es siempre buena idea! Tratar de decir las cosas importantes también...

Carmela: creo que eso nos pasa a todos! somos un rato y un rato pero alguna forma predomina.

¨: su capacidad para convertirlo todo a principios físicos me abruma. Le conté que no me agrada esa ciencia?

Mappet: hablar y callarse pueden jugar en contra. Creo que el secreto es el punto justo.

Lady Chatterlry: si, vale! Es más, lo recomiendo.

Dago dc: soy apenitas maniática con el idioma! Vos también tenés base de datos? me siento menos sola... gracias!

Staff de bla bla bla: lo demás es requecho (?)

Bueno, me voy a intentar encontrar el punto medio un rato.

Salutti a tutti!

Andre dijo...

Mmmmmm no se vale ser de las dos, eh?
YO creo q tengo momentos de habla y momentos de escucha .... dependiendo del interlocutor.... qué sé yo ...

Café (con tostadas) dijo...

Hola!

Daria: si, vale...

Saludos.

Dago dC... dijo...

Cafe: por supuesto que tengo base de datos!... Con decirte que a veces hasta me aprendo los documentos de las personas "por las dudas"... Todo: Fechas de cumpleaños, colores, comidas, marca de ropa, gestos, manias, frases... Soy un observador omnisciente que como un anticuario va juntando información, que después de todo es el bien más valioso. jeje! Besotes!

Café (con tostadas) dijo...

Hola!

Dago dc: yo también! me sé documentos, cuentas bancarias, teléfonos, cumpleaños, aniversarios. Y también, tortas, postres, regalos, ropa, expresiones... mi cabeza almacena aún contra mi voluntad!

Saludos

naco dijo...

Con esas personas la verdad yo maldigo llevar las orejas puestas.

(si como felipe de Mafalda)

Juaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa

naco dijo...

Fue broma ehhhhhhhh!!!!

Ahora si el coment serio:

Mira, yo soy de las que tiene un afacilidad increíble para hablar de todo. Conozco a alguien entro en confianza y converso fácilmente de cualquier tema.

Como tu dices hay personas que no tienen esa capacidad, pero yo las admiro mucho porque son un misterio constante.

Mi mejor amiga es precisamente lo contrario callada como tú... reservada diría yo.

Pero nos entendemos de mil maravillas, sera la ley de la compensación que le dicen: "Siempre hay un roto para un descosido" en todo!!!

Besitos.

Café (con tostadas) dijo...

Hola!

Naco: jajajajaja y si, creo que se compensa, que se armoniza!

Ah! y me encanta la frase del roto y el descocido!

Saludos.

Gugu dijo...

hola! empecé a leerte este año pero cuando encuentro blogs que me gustan me encanta mirara las publicaciones para atrás y conocer a quien escribe!
me encanta el ida y vuelta que tenes con el lector...

Admiro tu forma de escribir lo que pensas... Yo ecribo cosas muy distintas, pero escribo al fin y creo que es la mejor terapia...


En fin FELICITACIONES!!! en particular me encantó este texto :)

Café (con tostadas) dijo...

Buen día!

Gugu: qué gusto encontrarme con este comentario! yo también hago eso con los blogs que me gustan, jajaja.

Muchas gracias por los piropos y bienvenida!

Salú!