No es sencillo levantarse. Es un acto de voluntad. Significa romper el mundo plácido de los sueños y el reposo para reincorporarse a la realidad... La inercia nos puede, implica mucho esfuerzo vencer la quietud y la calma. Sin embargo, hay un momento puntual, definido, en el que uno siente que valió la pena el esfuerzo.
Justo después del tedio de abandonar el lecho y arroparnos de una u otra manera, llega el ritual de cada mañana. En mi caso, el momento de poner la pava al fuego, reunir en una taza los ingredientes del infaltable café de cada día y poner música.
No es un instante cualquiera, no simboliza otro eslabón en la cadena de actos rutinarios... elegir la primera canción del día es un ritual. En realidad, no se trata de elegir sino de descifrar.
Hay algo, un mecanismo particular que hace que cada mañana una canción me despierte. Aún en los peores despertares, en las jornadas que predecimos atiborradas de complicaciones, mi cerebro se escabulle de los enredos y se esconde en una canción por unos segundos.
Si soy capaz de detectar la melodía exacta que suena en mi interior en el instante previo a abrir los ojos y la escucho tomando mi café con leche (ése que tomo en mi taza especial, con mis pantuflas más cómodas y el pelo alborotado), si todas esas acciones cotidianas se conjugan, entonces, aunque más no sea por unos minutos, soy una persona feliz y estoy en calma.
Después el mundo puede arremeter, la tristeza puede encontrar la grieta en la muralla, puede el enojo crisparme los nervios o la ansiedad alterar mi respiración... durante todo un día sé a ciencia cierta que hay una canción en la que me voy a refugiar y que ese sonido en mi cabeza puede devolverme la calma.
Justo después del tedio de abandonar el lecho y arroparnos de una u otra manera, llega el ritual de cada mañana. En mi caso, el momento de poner la pava al fuego, reunir en una taza los ingredientes del infaltable café de cada día y poner música.
No es un instante cualquiera, no simboliza otro eslabón en la cadena de actos rutinarios... elegir la primera canción del día es un ritual. En realidad, no se trata de elegir sino de descifrar.
Hay algo, un mecanismo particular que hace que cada mañana una canción me despierte. Aún en los peores despertares, en las jornadas que predecimos atiborradas de complicaciones, mi cerebro se escabulle de los enredos y se esconde en una canción por unos segundos.
Si soy capaz de detectar la melodía exacta que suena en mi interior en el instante previo a abrir los ojos y la escucho tomando mi café con leche (ése que tomo en mi taza especial, con mis pantuflas más cómodas y el pelo alborotado), si todas esas acciones cotidianas se conjugan, entonces, aunque más no sea por unos minutos, soy una persona feliz y estoy en calma.
Después el mundo puede arremeter, la tristeza puede encontrar la grieta en la muralla, puede el enojo crisparme los nervios o la ansiedad alterar mi respiración... durante todo un día sé a ciencia cierta que hay una canción en la que me voy a refugiar y que ese sonido en mi cabeza puede devolverme la calma.
12 comentarios:
Que valioso lo que alcanzaste Cof...
Beso
G: gracias por comentar esta entrada!!!!
es tan importante para mí esto de la canción del día...
;)
G: ;)
Capaz que comentar la primera entrada de un blog que tiene más de dos años es una gilada y ni veas mi comentario. Pero la verdad que me gustó mucho leer varias decenas de tus post (musicalizados por tu selección temas), al principio para no hacer lo que tengo que hacer y después porque no pude dejar.
De repente me dieron ganas de conocerte, de darte un abrazo y de agradecerte por el buen rato. Quizás porque yo también disfruto del café de la mañana, quizás porque los anteojos que usas para ver el mundo se parecen a los míos. Quizás por nada.
Te comento el primer post, sólo para decirte gracias. Saludos desde Córdoba.
PelosNecios:
1- gran nik! jajajaja
2- nada de gilada, este comentario es un mimo tan bonito que no sé si podrás dimensionarlo!
3- ojo, leer mucho DEP de corrido está contraindicado para la salud ;)
4- "quizás porque... " buena estrategia discursiva, sí, sí... me gustó.
5- ay, viste que tengo una cosita con los abrazos con desconocidos/as... pero podemos empezar con una cerveza, no?
Y, definitivamente, gracias a vos.
Buenísima la listita ;)
1- Gracias. Lo único positivo de mis rulos es que inspiró el nick :D
2- No soy de escribir comentarios. Pero me alegro si además de llegarte, llegó bien.
3- Debe ser... me dieron ganas de escribir un comentario. Cosa rara. Y debe ser grave: ahora va el segundo... jaja.
4- Gracias, capaz que me salió de bestia nomás.
5- Sí! Me dí cuenta después que lo escribí. No ibas a abrazar a un desconocido. Pero la cerveza está bien, mucho más un fernet.
Un apretón de manos entonces! ;)
PelosNecios:
oh! cómo me gusta enumerar!!!
1- envidio tus rulos... sabelo. Mis pelos son necios pero lacios... bua!
2- deberías replantearte esa política, te sale muy bien!
3- te das cuenta? hace mal, te altera el cerebro! Yo no me quejo pero no acepto reclamos :P
4- oh, me arruinaste la ilusión de alguna influencia suigenerisiana (?)
5- (música celestial) fernet, totalmente... si querés lo preparo yo. Modestamente, se me da!
6- apretón de mano izquierda o derecha?????
Yo soy así, sumo y sigo ;)
Bueno, ya en chat-blog, empardo la suma.
1- Varias mujeres ya me han hecho comentarios parecidos ¿Los medios-rulos están de moda? Igual los sufro.
2- Heme aquí ;)
3- Bueno, pero como contrapartida ahora tenés que bancarte el desvirtúe de los lectores.
4- Capaz que se me filtró del inconsiente de tanto ver post musicalizados. Musicalicemos los comentarios.
5- Te cedo el honor. Me quedo pensando como se comparte un fernet por internet y en diferido ;)
6- La convención social dice la derecha. Los zulues daban la izquierda porque implicaba soltar el escudo de guerra como modo de no mostrarse a la defensiva, un estar sinceramente abiertos al saludo... además es la del corazón. ¿Cúal ofrecés vos?
Va para largo parece... jaja.
PelosNecios:
mirá que si lo que estás esperando es que yo me calle, se te van a cansar los dedos!!!! :P
1- eeeeesa, ganador!!!! las mujeres somos así, tenemos envidia de los rulos ajenos (?)
2- hete ahí, sí, sí... pero guarda la tosca, en cualquier momento me creo que estás dispuesto a cambiar cualquier política por sugerencia mía y se arma la de san quintín!!!
3- patraña patrañera. Los lectores no desvirtúan... reversionan. (???)
4- será??? (el problema es que ahora que pensé 'será' se me ocurren canciones horrorosas!)
5- fernet por internet es inviable. Hay interferencia de -ets...
6- pero mirá vos cómo era la cosa! Haber sabido... Yo doy la izquierda, pero no por zulu o no convencional, por zurda nomás. Igual, la gran mayoría de las veces quedo pagando y tengo que cambiar de mano porque si vamos a esperar que un diestro atine a estirar la izquierda... envejecemos!
dah! si puesta a hablar podemos estar así por el resto de la eternidá! jajajaja
Saluti a tutti!
Me rindo! Ya se me complica respetar los puntos.
No tenés un chat en el blog? jaja. Muy rico todo... de-n-serio.
Un apretón de izquierdas.
PelosNecios:
jajajaja, con las charlas soy como con el mate. Siempre quedo solita tomando cuando ya todo dijeron basta!
Apretón de izquierdas pra vocé!
Publicar un comentario